Hola Alex. He leído y releído tu escrito sobre el FaceBook y las redes sociales (
https://www.aprenderaprogramar.com/index.php?option=com_content&view=article&id=348:por-que-no-estoy-en-redes-sociales-ien-que-se-parecen-facebook-un-frigorifico-y-el-peligroso-ddt&catid=54&Itemid=177) y me ha dejado pensativa, muy pensativa, bastante pensativa. No voy a aclarar en qué se parecen un frigorífico, el DDT y FaceBook ya que no tengo datos para ello. Creo que nunca se van a parecer. A cada uno su lugar, su puesto y su función.
Si bien FaceBook es un ente globalizado y globalizador, un frigorífico alarga y conserva la caducidad de los alimentos perecederos y, además, los conserva en un mejor estado y, el DDT simplemente mata. Aunque en su momento cumplió una misión importante en la lucha en contra de la malaria, podría decir que el DDT ha propiciado una mayor avaricia en el ser humano y la avaricia no nos hace más felices. Sin embargo, es el último punto y el de mayor contundencia, el que más valor tiene para la toma de decisión en cuánto a pertenecer o no a una de estas redes sociales, en este caso el FaceBook:
“porque no me da la gana”. Eso es lo más respetable.
Pero, si se me permite, paso a desarrollar algunos aspectos que podrían pensarse o, al menos, reflexionarse. Eso sí, sin ningún ánimo de convencer a nadie ni de
“llevar al huerto” al que no le da la gana para una toma de decisión.
Con esto del FaceBook y, por extensión, las redes sociales, hemos tenido que cambiar de opinión habida cuenta de lo que cuesta adaptarse a una realidad nueva. Lo primero que nos viene a nuestra mente, ante un cambio de opinión por algo nuevo que se nos presenta es:
“ cuidado, puede ser que lo vayas a pasar mal, desconfía…etc. O , “
las cosas se pueden poner feas, no te fíes… etc.” También estoy en ello. También me pasa y así me siento. Y sin embargo todo va cambiando a nuestro alrededor. Todo cambia. Se cambia de sólido a líquido, de líquido a sólido y de líquido a gas, por poner un ejemplo cotidiano. La estructura de la materia va cambiando y así lo hacen también nuestras estructuras mentales, aunque no nos demos cuenta. Incluso la ciencia propicia que se vaya cambiando la condición humana. Así, muchas veces, uno va incorporando ciertas habilidades sociales y emocionales en nuestro diario acontecer, aprendiendo a gestionarlas con mejor o peor tino. Se produce pues un cambio, un cambio en pensamientos, hábitos… y hasta en la toma de decisiones. Sin embargo pienso que el cambio mental es muy lento y, por lo tanto, creo que la apertura hacia el exterior llega, a veces, a paralizarse en función de una mayor seguridad y/o comodidad, de tal manera que no llegue a incomodarnos. No te creas Alex, también miro a estas redes con recelo y desconfianza, puedo ser confiable pero desconfiada; pero dado que trabajas en internet y en programación de ordenadores, nadie mejor que tú para saber lo que se cuece en ese “gran horno”.
Pero no podemos negar que las redes sociales son una fuente de innovación insuperable. Se van extendiendo por doquier, mejor dicho, se han extendido.Y tú lo has expresado muy bien con una bella semblanza comparativa del tiempo de tus abuelos, en cuestión de un par de décadas. Ante el desfase generacional que apuntas y dado que trabajas en el mundo de Internet, tengo que decir que no te veo en esa línea. El mero hecho de estar en contacto con un mundo globalizado e inmediato como es el mundo de Internet, no te permite ese desfase.
Sin embargo yo no quisiera tampoco llegar a ese desfase y mucho menos a llegar a ser una “analfabeta cibernética”. Por todo ello anoto, más bien apunto unas someras ideas de auto convencimiento que me valen para no caer en ese desfase y, de paso, poder superar mi analfabetismo informático. Tal vez sea fuera una de las causas que me llevó a indagar e intentar profundizar un poco más en esta WEB en la que participas y en la que, por el momento, también lo hago yo ¿Y qué es ser anticuado?¿Ser anticuado es quizás tener el gusto y el placer de hacer una comida en una olla de barro, por ejemplo?¿O calzar cuando te apetece unas lonas de esparto que, dicho sea de paso, son maravillosas en comodidad?¿También puede haber quienes vean estos dos ejemplos que he puesto como “esnobismo” más que anticuados. Y volvemos al principio…
” todo depende del color del cristal con que se mire”.Así que, con el permiso, voy a intentar desglosar mediante algunos puntos, lo que me parece esto de las redes sociales y el FaceBook. Me he tomado mi tiempo en reflexionarlo, quedándome un cierto temor o recelo en mi persona después de haberte leído.
1. Con las redes sociales puedes tener información “ipso facto”, o sea, al momento. Instantánea.
2. Puedes tener una conversación (eso sí, virtual) entre varias personas a la vez. No es desechable, aunque lo que aporte la mayoría no me interese o no termine convenciéndome; al menos habrá uno que aporte algo que capture mi atención. O bien me deje un punto de pensamiento reflexivo o interesante que pueda ampliar mi mundo un poco más.
3. Hay una interacción entre los que utilizan en común estas redes. Eres al mismo tiempo protagonista y receptor de la noticia, de dimes y diretes (si te interesa) o bien de una simple opinión que ni tan siquiera hubieras pensado
.”De cualquier mato sale un conejo” ;-) Modulas y moderas el argumento que tienes entre manos en ese preciso instante.
4. Aunque sean contactos virtuales, puede haber uno, al menos, que empatizando contigo, pueda suministrarte información que te interesa y te llegue.
5. Descubrir otros mundos, otros criterios, otras ideas que, tal vez, por otros medios ni los hubieses descubierto nunca. Ejemplo: usas la parte derecha del ratón y pinchas sobre la imagen que recién te ha llegado y un nuevo mundo y/o información se abre de nuevo ante tus ojos. Otra vez tus neuronas se ponen a trabajar, hacen conexiones, empatan, asimilan, buscan y rebuscan para llenarte de lo que te ha llegado y que te ha interesado.
6. De una manera mediática intervienen en el mismo momento información universal, música, vídeos, fotos, arte, diferentes expresiones, lenguajes… y un gran etc. que hacen de tu persona un protagonista, compartiendo tu protagonismo con los de las otras personas que intervienen.
7. Tiene un carácter evaluativo. ¿Qué puede llegar a desencadenar un simple pensamiento, opinión, mensaje, sentencia, frase, refrán…etc.? No lo sabemos hasta que eso no se difunda y lo comprobemos, por ello hasta te puedes volver más prudente en tus intervenciones dado que tú mismo te estás evaluando y midiendo de cara al otro que también lo hace, o no, frente a ti. También puede volverte un poco más egocéntrico, sintiéndote tú el centro de un universo construido a tu imagen y semejanza.
8. En un foro incitas a una participación masiva con un argumento o “hilo” que abres. (El ejemplo lo tienes en tu propio artículo; éste que estamos comentando). Y un foro también forma parte de las redes sociales.
9. Una simple frase puede llevar a cada quien a interpretar un punto de vista distinto, punto de vista que se le hubiera escapado de no haberse propiciado en un foro, en un hilo, en una red social.
10. Es también una manera de transmitir sentimientos, gustos, disgustos y empatías y/ o formas de ser y de actuar. Además de otras tantas emociones que conforman al ser humano.(Ejemplo: “Soy una anticuada, soy una desconfiada, una recelosa, una dubitativa, una complicada en mi forma de pensar, tengo una envidia insana, soy una incrédula, tengo hemorroides y puedo hacer el pino desnuda con Obama”). Si es verdad, estoy siendo honesta conmigo misma y también con los demás. Si no ha sido verdad lo que he publicado, se me evaluará; pero esa ha sido responsabilidad mía. Pero de una manera u otra no soy tan importante como para que se centren en mis rasgos personales, mis criterios, mis opiniones y se ensañen conmigo. No somos el centro del mundo. Casi todos pasamos muy desapercibidos a los ojos de los demás. Está todo el mundo tan ocupado que no importamos mucho a casi nadie… Es más, no importamos nada. Tal vez, es por eso por lo que las redes sociales llegan a ser casi efímeras y momentáneas.
11. Pero todavía y según lo anterior, hasta puedes ser selectivo con tus amigos o los que tú quieras considerar como tales. Puedes elegir los que te convienen y descartar los que te aburren, los que te han incordiado, los que no han sido correctos y educados en el trato, los que no salen de las mismas tres letras de siempre… etc.
12. En un “hilo” en el que participes, la mera participación puede darte una cierta moral y seguridad. Tal vez esa experiencia no se hubiera dado de no haber existido las redes sociales. O si se hubiera dado, hubiese sido a un muy largo plazo y no en las mismas condiciones.
13. En un foro o en una red social tienes que saber hasta dónde llegar. Es bueno para ti y también para los demás. Existe el respeto y moral íntegro hacia la otra persona. Y de no existir, pues das de baja a quién pasó de aplicar la norma de cortesía y educación. También lo hacemos en la vida cotidiana sin pertenecer a redes, desde tus abuelos y mucho más antes, hasta nuestros días.
14. Puedes compartir chistes, juegos de palabras, emociones mediante emoticones
y, aunque estés en ese momento sólo en tu casa, sabes que hay alguien más a tu lado. Te puedes reír solo frente a la pantalla y ya sabemos… una buena carcajada vale por unos cuántos años más de vida. Además de la iluminación del rostro que se te queda
15. Si no hubiera FaceBook o alguna de las redes sociales, uno no sabría lo que está pasando en el mundo mundial de una manera tan rápida, directa y de primera, segunda, tercera…y todas las demás manos. Un buen abanico de opiniones que pueden conformar mejor la nuestra.
16. Ahora mismo las redes sociales son un crisol de alternativas culturales, de ocio, esparcimiento y un cierto bienestar compartido.
Bueno Alex, espero que sepas disculpar esta retahíla tan extensa. En realidad sólo me alongué al postigo de esas ventanas antiguas de cuadrados y que se abrían hacia afuera para otear la vida del exterior sin ser vistos. La sorpresa fue que vi pasear con tacones a
“fulanita”, la que se casó con
“menganito” y que además viste fatal y que cada vez que pasa bajo mi ventana la conozco por sus estrepitosas carcajadas y por el rastro que deja de su perfume. Ella taconea más cuando pasa por aquí, se creerá que yo no sé porque lo hace pero… etc., etc. etc.
Nada nuevo bajo el sol. También se fisgoneaba y no había mucha intimidad en otras épocas. Sólo que se hacía tras los ventanales ahora se hace tras el cristal.
Saludos.